Barack Obama ha advertido que la intención de Irán de fabricar armas atómicas “es claramente contraria a los intereses de seguridad de Estados Unidos y de algunos de sus aliados, especialmente Israel” y ha asegurado que, en coordinación con la comunidad internacional, hará lo necesario para evitarlo, sin descartar ningún medio.
En una breve conferencia de prensa en la Casa Blanca, el presidente norteamericano manifestó también que “Europa cuenta con recursos suficientes” para resolver la crisis que actualmente le afecta, pero recordó que es necesario tomar cuanto antes “las medidas políticas” que se requieren para conseguirlo.
Su declaración sobre Irán, que se produce en medio de crecientes sospechas de que la Administración norteamericana está implicada en algún tipo de actividad encubierta para frenar el programa nuclear iraní, eleva un grado más la tensión generada por un reciente informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que confirmaba el peligro de que el régimen de Teherán utilice su proyecto atómico para fines militares.